“De la Euroliga a los fundamentos técnico-tácticos para tener iniciativa”, por Xavi García
“La competitividad no depende ni del tamaño ni de los recursos: Depende de la iniciativa para la innovación.” (Jorge González)
Observando con atención el baloncesto que podemos ver en Euroliga, me gustaría comentar tres aspectos que actualmente permiten tomar iniciativa, mantenerla, o recuperarla, en un universo de amplio conocimiento de la táctica, scouting al detalle y todos estos temas enfocados en que el otro equipo no consiga imponer sus prioridades. Algunos son más novedosos que otros. No pretendo reflejar la posible innovación, sino el hecho de que ahora mismo, representan, pese a ser conocidos, elementos de máxima incomodidad para los rivales. Y reflexionar a la vez, cuanto de todo esto podemos potenciar y desarrollar en los jugadores y equipos en etapas formativas. Creo que mucho. ¿Dónde poner el foco cuando vemos Euroliga, como entrenadores de formación?
RECURSO 1. La triple amenaza del “base” al cuadrado. Tener dos jugadores en pista que puedan jugar el bloqueo directo con tres posibilidades de alto porcentaje. Tiro de tres detrás del bloqueo, tiro de 2 en desequilibrio o en equilibrio de 3-5 metros, y finalmente penetración con todo para finalizar o asistir.
Es importante el concepto de “al cuadrado”, en el sentido que parar a uno se puede hacer de diversas formas: poner al 3 a defenderle y buscar cambios con pívots defensores muy atléticos, poner al mejor defensor encima de este jugador….. Pero con dos a la vez se complica mucho más.
El concepto del base organizador, sin esa triple amenaza, limita las capacidades de romper scout gracias a talento superior. Por otro lado, si solamente el base en pista tiene esa capacidad, los aleros no entran tanto en juego. Tener dos a la vez en pista permite alternar y mantener a dos jugadores en juego. 3 y 4 abiertos y un 5 con capacidad atlética y/o mano para jugar continuaciones a los espacios libres hace el resto. Lo vemos hace tiempo en al Madrid, CSKA….
RECURSO 2. El 4 multiplica el juego. La posición de 4 permite cambiar totalmente estructuras de juego, jerarquías, normas defensivas y ofensivas, focos de desequilibrio y ritmos de juego. Desde jugar con dos “5”, al típico 4 tirador, o al 3 jugando de 4, como vimos ayer con Perperoglou en los momentos de mejor juego del Barça. Es una de las guerras que rompe guiones, siempre son riesgos a tomar si el partido no va por donde quieres. Aprovechar al límite todas las posibilidades ofensivas y defensivas que permite cada una de estas maneras de ocupar el 4 es un factor clave para imponer iniciativa.
RECURSO 3. De turistas en los roles de otros. Aleros reboteando y cruzando la pista con máxima verticalidad, sin pasar por el base el balón (Hanga). Un base en el poste medio, buscando la ventaja (CSKA y Barça contra Baskonia). Un 5 abriendo el campo para tirar, asistir en los espacios de corte y sacar al 5 a defender fuera con todo lo que eso supone (Boroussis). En este sentido, gana peso la consciencia en basket formativo de potenciar estos talentos de jugadores que ocupan una posición por físico y/o capacidades técnicas, pero que a la vez tienen el potencial de desequilibrar en acciones técnico-tácticas fuera de dichas posiciones.
Dentro de un mundo cada vez más polarizado hacia el análisis y el estudio del rival, y como contrarrestarlo, el foco en estos y otros recursos puede ser una ayuda para retornar, mediante un contexto táctico enfocado a ello, la iniciativa al jugador y su talento.
“En la táctica, todo encuentro, grande o pequeño, resulta un encuentro defensivo si dejamos la iniciativa al enemigo y esperamos que se adentre en nuestro frente.” (Carl Von Klausewitz).
Xavi García
Entrenador Superior de Baloncesto
Especialista en Coaching Deportivo